miércoles, 31 de octubre de 2012

Dieta Ovolactovegetariana


Después de buscar e informarme mucho sobre el tema, creo que estoy en condiciones para dar el paso y empezar, definitivamente, con una dieta ovoláctovegetariana. Antes de nada, quiero decir un par de cosas. La primera es que no soy nutricionista ni pretendo jugar a serlo y todo lo que escribo y escribiré lo hago desde la propia experiencia, no desde un punto de vista científico ni técnico. Y la segunda es que el hecho de empezar con una dieta así no significa que esté cerrado al 100% a comer carne o pescado. Si en algún momento tengo algún tipo de carencia (la más importante, quizás la única, puede ser la falta de vitamina B12), optaré por comer alguna pieza, siempre dando prioridad al pescado sobre la carne.

Lo cierto es que aunque ahora empiece de forma más estricta con esta dieta, llevo desde el mes de julio comiendo muy poca carne. Desde entonces, no he probado los embutidos (nunca me han hecho especial gracia) ni el lomo de cerdo y he comido ternera una sola vez si no recuerdo mal. La única carne que he ido comiendo de vez en cuando ha sido la de pollo. En cuanto al pescado, he ido tirando de atún, salmón, lenguado, sardinas,... aunque en cantidades muy pequeñas. Digo esto porque dejar de comer este tipo de alimentos no me supondrá ningún esfuerzo, ni mucho menos. Estoy más que acostumbrado y le he encontrado el gusto a otro tipo de alimentos que me aportan la energía suficiente para llevar a cabo mis entrenamientos y la posterior recuperación. Creo que la parte más dura de llevar esta dieta será el entorno. La gente que me rodea seguro que opinará (y su opinión será muy respetable aunque no la comparta), me dirá que no es sano dejar de comer carne y pescado y que estoy cargado de manías. Sé que tendré “problemillas” en reuniones familiares, que muchos me mirarán como un bicho raro y hasta tendré dificultades a la hora de comer fuera de casa. Lo sé, lo acepto y me hago cargo pero, sinceramente, no me importa. Supongo que todo será cuestión de acostumbrarse (tanto los demás como yo) y lidiar con estos obstáculos lo mejor que pueda.

El principal motivo que me ha llevado a tomar esta decisión es deportivo. No sé si habrá sido casualidad o no pero desde el mes de julio que empecé “a medias” con este tipo de dieta, mi rendimiento, lejos de resentirse, ha mejorado. Además, perdí entre tres y cuatro kilos de peso. No olvidemos, también, que durante estos últimos meses mi entrenamiento no ha sido suave precisamente y me he estado moviendo siempre en unos volúmenes importantes, sintiéndome siempre bien, sin carencias aparentes ni lesiones.  Y ya puestos, otra cosa que me ha llevado a esto es tener la “casi certeza" de que la calidad de la carne que consumimos es bastante dudosa.

Como en todo, habrá personas que estén a favor y personas que estén en contra de este tipo de dietas. Gente con unas ideas y unas opiniones tan válidas como otras. No olvidemos que hay mucha gente que sigue la conocida paleodieta (a grandes rasgos, a base de frutas, verduras, carne y pescado, eliminando los cereales entre otras cosas) y también les ha servido para mejorar su rendimiento deportivo. Yo no pretendo afirmar ni demostrarle nada a nadie, ni decir que lo que hago yo es mejor que lo que hacen los demás, sólo quiero probar de alimentarme así, ver si esto es saludable y si, además, es compatible con el tipo de vida que llevo, nada más. Puede que de aquí a un tiempo vea que no me va bien y me tenga que echar atrás, pero ya lo veremos.

Ahora se me abre una nueva forma de alimentarme. Últimamente he introducido una serie de alimentos que hace relativamente poco ni conocía, pero soy consciente que me quedan por descubrir muchos más. Será interesante y enriquecedor para mí seguir probando y aprendiendo cosas nuevas y comprobar si puede ser o no beneficioso a largo plazo.

Ahora un par de ejemplos de deportistas de élite (no estamos hablando de “populares” como yo) que optaron o han optado por una dieta vegetariana. El primero de ellos es el de Carl Lewis. No tenía ni idea que era vegetariano y que ni siquiera tomaba huevos ni lácteos. En este artículo habla un poco de su experiencia personal y de cuando llegó su mejor momento deportivo.

El otro ejemplo es el de Victor del Corral, triatleta profesional y vencedor este año del Ironman de Lanzarote. Él sí que sigue la dieta ovolactovegetariana y lo explica brevemente en este video. A ver que os parece.


Para terminar, dejo un artículo de SportLife que nos habla de la dieta vegetariana para deportistas y hasta da un pequeño ejemplo de menú para un día. Sinceramente y por suerte, creo que hay muchas opciones más de las que pone ahí pero puede servir para hacerse una pequeña idea. En fin, veremos como va esta nueva aventura. Estoy abierto a cualquier opinión, sugerencia o comentario que queráis hacer.

martes, 30 de octubre de 2012

Crónica 10k "Tarragona 2017"

El domingo, después de una semana intentando entrenar lo más específicamente posible para afrontar una carrera de 10 km con ciertas garantías de mejorar mi marca en la distancia, me planté en la línea de salida de los 10 km “Tarragona 2017” descansado, tranquilo y confiado de que esta vez sí que lo podía conseguir. Tenía una nueva ocasión para lograrlo después de haber “fallado” en el tramo final de la última carrera de 10 km en Leganés dos semanas antes. La verdad es que este domingo lo tenía todo a favor. Corría al lado casa, con lo que pude hacerlo todo con menos prisas e incluso Arancha y yo fuimos caminando tranquilamente a la salida. Descansé un poco más de lo normal (aprovechando el cambio de hora) y tuve tiempo para hacer un buen calentamiento, que no siempre es así. Lo peor, el viento que hacía. Habían bajado bastante las temperaturas de un día para el otro pero lo que iba a hacernos sufrir más de la cuenta iba a ser el viento, seguro. Instantes antes de comenzar busqué un sitio adecuado para poder hacer una buena salida y listo, ya sólo faltaba lo más importante, correr.

La salida fue limpia y sin complicaciones. Ya durante los primeros metros se empezaron a formar grupos y yo me quedé en uno de unos nueve o diez corredores. Conocía los tiempos de algunos de ellos y sabía que eran lo bastante rápidos como para ayudarme a conseguir mi objetivo. Me intenté unir al grupo y mantener el ritmo. No me costó nada durante los dos primeros kilómetros, que pasamos a 3’35” y 3’39” respectivamente, pero entre el segundo y el tercer kilómetro, coincidiendo con el único tramo con algo de subida (por la Avenida Ramon y Cajal) mi ritmo se resintió un poco (3’55”). A partir de ese momento algunos corredores del grupo se fueron quedando atrás y otros se destacaron, y de camino al Polígono Industrial Francolí por la Avenida Roma, con bastante viento de cara, el grupo ya se había disuelto. Yo iba bastante pendiente del Garmin y, a pesar de no sentirme mal, veía que el ritmo había bajado algo respecto al principio aunque me mantenía alrededor de los 3’45”/km. En el punto intermedio de la carrera y ya de nuevo en Tarragona, volvimos a pasar por la línea de salida para encarar los siguientes cinco kilómetros, que discurrirían básicamente por el faro. Para mí fueron los peores momentos de la carrera, con un viento de cara muy incómodo al ir y que apenas ayudó al volver y empezando a sufrir bastante para poder mantener mi ritmo (eso sí, siempre por debajo de los 4’/km). En ese tramo me adelantaron varios corredores que llegaban muy fuertes desde atrás. Fueron momentos complicados. Estaba deseando terminar aquello cuanto antes y realmente no tenía referencias (ni estaba en condiciones de hacer cálculos en esos momentos) de cual podría ser mi tiempo finalmente. Sabía que iba camino de mejorar los 39’20” pero sin demasiada exactitud. Además, mi Garmin últimamente en todas las carreras me marca más metros de lo que marcan los circuitos y aunque no sea gran cosa, despista. Ya volviendo del faro y con el cartel del noveno kilómetro a la vista, tocaba hacer el último esfuerzo. Intenté subir el ritmo y me volví a poner por debajo de 3’50”/km. En esos momentos, cuando estás tan cerca de la meta, parece que todo se ve diferente. No voy a decir que fuera sobrado de piernas ni que dejara de sufrir, pero sí que cambió la perspectiva. Encaré la zona de los tinglados y llegué al Serrallo (donde estaba colocada la llegada) bastante entero. Un poco antes de llegar a meta el reloj ya me marcó los 10 km pero aún faltaban unos ciento y pico metros que hice al sprint y que me sirvieron para adelantar a un corredor. Pisé la alfombra sin pararme a mirar ni siquiera el crono situado en el arco de meta y paré el mío también sin mirarlo. Creo que nunca había hecho un esfuerzo tan grande en una carrera. Normalmente siempre reservo fuerzas y me quedo con la sensación de que podría haberlo hecho algo mejor, pero creo que en esta ocasión no me guardé gran cosa. Al final, paré el crono con un tiempo de 38’17” llegando a meta en la posición 36 (25 de mi categoría) de 627 llegados a meta (clasificación)

Pues sí, al final logré lo que me había propuesto y, sinceramente, me fue bastante mejor de lo que esperaba. Al principio me bastaba con bajar de 39'20", después pensé en bajar de 39' y al final hice poco más de 38'.  El próximo objetivo ya tendrá que ser el sub 38', veremos para cuando. El caso es que terminé muy satisfecho sobre todo si tengo en cuenta que esta distancia de 10 kilómetros para mí nunca ha sido una prioridad. Me lo propuse para tener algo más de motivación de cara a lo que queda de temporada pero nada más. Llevo todo el año centrado en los triatlones de media distancia, entrenando relativamente poco y con cierto recelo la carrera a pie (a estas alturas del año aún no he llegado a los 1.000km), haciendo pocas series de velocidad en la pista y muy pocas tiradas largas. No sé, a lo mejor me conformo con poco pero creo que en general es para estar muy contento con mi rendimiento este año.

Para terminar, como siempre, dejo las fotos de Arancha (en las galerías de fotos gratis de la Bolsa del Corredor no salgo) y los resultados del Garmin con todos los detalles sobre mi carrera.
 
 


lunes, 29 de octubre de 2012

Nuevo objetivo a la vista

Vayamos por partes. Ya sé que dije hace pocas semanas que de aquí a final de año sólo quería disfrutar, hacer todas las carreras que pudiera sin marcarme ningún objetivo claro ni nada por el estilo. Sólo tenía la pretensión de volver a vivir las carreras como cuando empecé en esto, pensando y siendo consciente de que todo lo que tenía que hacer este año ya lo había hecho y, además, con buena nota. Es verdad que cuando lo escribí realmente lo pensaba, y en cierto modo lo sigo pensando, pero desde que hace dos semanas en Leganés me quedara muy cerca de mejorar mi marca en los 10km, sufrí un pequeño cambio de mentalidad. Me piqué, volví a activar el modo competitivo y a querer un poco más. Sé que estoy en un buen momento de forma y, entonces, pensé: ¿por qué no aprovecharlo y despedir el año luchando por mejorar alguno de mis mejores tiempos en carrera? El caso es que este domingo, en los 10km “Tarragona 2017” sabía que tendría una gran oportunidad de conseguir rebajar mi mejor marca y sacarme la espinita de Leganés. El circuito parecía propicio para ello y había que, por lo menos, intentarlo.

Y todo esto viene porque durante la semana mi entrenamiento ha estado centrado y dirigido, básicamente, en correr. Sólo me he preocupado de hacer una buena preparación (tanto a nivel de entrenos como de descansos) para la carrera del domingo. Para ello, no he tocado la bicicleta y no he trabajado (apenas) el tren inferior en el gimnasio. Eso sí, he hecho bastantes metros en la piscina, casi siempre después de los rodajes a pie. En total, han sido algo más de 9 horas que, frente a las casi 14 de la semana pasada, considero mucho más productivas. Esta ha sido mi semana:

Lunes.- Rodaje de 10,13 km en 42’27” a ritmo de 4’11”/km. Después, 3.000 m de natación (con técnica y series de velocidad) en 1h03’39”.

Martes.- Calentamiento de 20’ + 3 series de 1.600 m en la pista (rec. 2’30” al trote) + 5’30” de enfriamiento. Las series de 1.600 m las hice a ritmos de 3’38”, 3’38” y 3’37”/km. En total, fueron 11,46 km en 48’01” a un ritmo medio de 4’11”/km. Después, 60’ de gimnasio y 1.600 m de natación suave en 34’03”.

Miércoles.- Rodaje de 10,38 km en 45’27” a ritmo de 4’23”/km. Después, 3.200 m de natación seguidos en 1h06’49”.

Jueves.- Rodaje de 8,33 km en 36’59” a ritmo de 4’26”/km.

Viernes.- 25’ de elíptica + 35’ de gimnasio + 1.500 m de natación suave en 31’23”.

Sábado.- Rodaje suave de 3,98 km en 19’20” a ritmo de 4’51”/km + 4 progresivos de 100 metros recuperando 30”. En total, 4,52 km en 22’40”.

Domingo.- 10km “Tarragona 2017” haciendo un tiempo de 38’17”, rebajando en 1’03” mi anterior mejor marca en los 10km que tenía desde finales de febrero del año pasado. Mañana espero escribir la crónica con todos los detalles y las fotos.

Ahora toca pensar en el siguiente y nuevo objetivo que me planteo: la Mitja de Tarragona del 25 de noviembre. Éste sí que será el último gran reto del año. Faltan cuatro semanas en las que entrenaré duro para intentar bajar de 1h27’. Eso es lo que me propongo a día de hoy. No sé si ahora mismo es mucho o es poco, pero de momento me conformo con conseguir bajar de ese tiempo. El resto de competiciones que tengo pendientes, como dije en su día, sí que serán para disfrutar, para acumular kilómetros de cierta calidad (sobre todo en la Behobia/SS) y poco más. Al final cumpliré "a medias" lo que dije.

Pues así están las cosas. Hoy empiezo un entrenamiento express de sólo cuatro semanas que me tiene que permitir conseguir lo que me he propuesto. Veremos si lo consigo o no porque, los dos últimos años, la Mitja de Tarragona ha sido una carrera muy gafe para mí. Esperemos que la cosa cambie este año.

En cuanto a mi "maratón" particular de siete semanas seguidas participando en carreras, el siguiente paso es la 1ª Cursa Solidària de la Fundació PortAventura. Una carrera de 10km que transcurre a ratos por dentro del parque y que parece, por lo menos, original y divertida.


martes, 23 de octubre de 2012

Crónica 4ª Marxa Btt Eutiches

Este domingo, a pesar de celebrarse también los 10km y la Mitja de Reus, preferí cambiar un poco de aires, coger la bicicleta de montaña y participar en la 4ª Marxa Btt Eutiches (56 km). Lo hice, fundamentalmente, porque durante las próximas semanas correré tres “diez miles”, la Behobia/SS y la Mitja de Tarragona de forma seguida, así que pensé que, para no saturarme ni hacer demasiadas veces lo mismo, esta sería una buena opción. Además, me pillaba muy cerca de casa.

Después de las lluvias que cayeron a lo largo de todo el sábado y durante las horas previas a la carrera (llegué a pensar que se anularía la prueba), todo hacía pensar que el recorrido en general se endurecería y se haría más difícil. Por suerte, esta vez sí, fui mentalizado que única y exclusivamente quería disfrutar. Daban igual los tiempos y la clasificación. Me encontraría en un terreno que no es el mío y en el que no estoy demasiado acostumbrado, así que lo más importante era pasarlo bien y no tener ningún percance serio en forma de caída o lesión.

Llegué a la recogida de dorsales con bastante tiempo. A pesar de ser menos de 300 inscritos entre las dos carreras (26 y 56 km), las colas fueron muy lentas y tardé casi media hora en recogerlo, increíble. Después, realicé un suave calentamiento que se alargó mucho debido al retraso con el que empezó la carrera. Sobre las nueve y media, por fin, salimos.

Desde Tarragona, fuimos por la carretera (supongo que para estirar el grupo) hasta el aparcamiento del Puente del Diablo y, una vez allí, empezó la auténtica carrera de montaña. No salí fuerte y me situé en un grupo del medio. Pequeño error si tenemos en cuenta que nada más entrar a los caminos de tierra se empezaron a formar tapones y tuvimos que bajarnos de la bici varias veces en tramos sin dificultad. Es una cosa que no acabo de entender. Está claro que cada uno tiene su nivel, sus virtudes y sus carencias (yo por ejemplo soy consciente de que bajando soy lento) pero bajarse de la bici a las primeras de cambio... Durante estos primeros kilómetros el recorrido está en buenas condiciones a pesar de las lluvias. No hay demasiados charcos, no hay demasiadas piedras, incluso a ratos es un camino ancho donde se puede adelantar. Además, me vienen bien porque son de subida y, yendo tranquilo, gano alguna que otra posición. Hecha esta primera subida, empieza un recorrido rompe piernas con continuas subidas y bajadas. Voy a gusto, disfrutando. Me lo estoy pasando bastante bien y de momento no he tenido ningún susto, que ya es mucho. Hasta me sorprendo en alguna zona medio técnica donde me desenvuelvo relativamente bien. El recorrido llega hasta Vespella de Gaià pasando por el pantano para después dar la vuelta y volver por otro camino. Antes de llegar al pueblo y casi en el ecuador de la carrera, entramos en una zona con una serie de charcos muy largos. A lo mejor exagero pero algunos debían ser de casi 100 metros. Menos mal que no eran muy profundos. Además de estos, también hay otros más pequeños que varias veces, en lugar de esquivarlos, paso por encima recreándome como si fuera un niño pequeño. Señal de que me estoy divirtiendo. Una vez en Vespella, y después de otra gran subida de asfalto, toca dar la vuelta y volver. Llevo sin beber nada en todo el rato así que en el tercer avituallamiento decido para a tomar algo. Justamente en ese no había líquidos, sólo sólidos, así que cojo trozos de plátano y naranja y sigo mi camino. Volvemos a pasar por el pantano y, en ese momento, tanto yo como cuatro ciclistas más no vemos marcas del camino a seguir por ninguna parte. Damos vueltas, paramos a hablar y perdemos algo de tiempo pero al final encontramos una señal que nos indica el camino. Sinceramente, en esa zona creo no haber estado nunca en bici y estoy desorientado. Por suerte, es la señal correcta y vamos en grupo un rato, aunque poco. Vuelvo a parar en el siguiente avituallamiento y bebo un aquarius. La verdad es que me apetecía después de casi tres horas sin beber absolutamente nada.

A partir de ahí, el camino de vuelta a meta es muy entretenido. Hace casi todo bajada y lejos de pasar apuros, se me hace muy entretenido. No arriesgo en ningún momento pero tampoco voy lento. Y digo esto porque en todo ese tramo no me adelantó nadie, buena señal. Poco a poco voy reconociendo el camino y, finalmente, volvemos a aparecer en el Puente del Diablo. Esta vez, por eso, la vuelta a Tarragona no será por la carretera sino por el camino del río Francolí. Cuando veo eso, y como me conozco el camino casi a la perfección, me temo lo peor. Efectivamente, esa zona está hasta arriba de agua. Si antes decía que de camino a Vespella había charcos de unos 100 metros, estos eran bastante más largos. Y lo mejor aún, mucho más profundos. Tanto que es imposible ir subido a la bici. En esos charcos alcanzo a tres ciclistas más que no saben por donde tirar, aunque no hay otra posibilidad, toca atravesarlos sí o sí. Pasamos subidos a la bici hasta que es posible y después, caminando con el agua hasta casi las rodillas. Después de los charcos, sólo queda terminar ese camino de un par de kilómetros más y llegar a Tarragona para dirigirse a meta. En ese momento, estando aún fresco, acelero, dejo atrás a los tres ciclistas y llego solo a meta entrando en la posición 59 de 122, quedando el 21º de mi categoría (clasificaciones). No está nada mal teniendo en cuenta como me he tomado la competición. Sobre el tiempo real, es una incógnita. La organización pone que llegué a meta a las 12:56, con lo cual, si salimos a las 9:30 fueron unas 3h26'. Según mi Garmin, el tiempo de pedaleo (o en movimiento) fue de 3h18'49" y el total (contando el tiempo parado en los avituallamientos y el tiempo que estuvimos parados buscando las señales correctas) fue de 3h32'37", así que hay tiempos para todos los gustos. Sinceramente, en esta ocasión me da absolutamente lo mismo. Disfruté, me divertí y terminé sin caídas ni problemas. Antes de empezar no las tenía todas conmigo.

Por lo demás, la organización me pareció un pelín justa en varios sentidos: recogida de dorsales muy lenta para los pocos que éramos, sistema de cronometraje, señalización del recorrido, bolsa del corredor... los avituallamientos sí que me parecieron suficientes y con cierta variación, pero a la llegada me tuve que conformar con una botella de agua ya que aún estaban haciendo el pan tostado y la carne (creo) y ya no me esperé.

A pesar de esos detalles, vuelvo a decir que me lo pasé bastante bien y no me arrepiento de haberla hecho en lugar de correr en Reus. Fue una mañana diferente.

No sé si la organización irá colgando fotos en la web. Yo de momento dejo las que me hizo Arancha llegando a meta y, como siempre, los resultados del Garmin: 

 



lunes, 22 de octubre de 2012

Semana muy suave

Otra semana que dejamos atrás sin sobresaltos ni grandes esfuerzos y, de nuevo, con muy poca natación, mucha menos de la que me hubiera gustado. Espero que esta semana la cosa cambie y pueda empezar a hacer buenas sesiones en la piscina porque falta me hace. A pesar de eso, me salen casi catorce horas (13h44”). Puede parecer una cifra muy alta a estas alturas de la temporada pero hay que tener en cuenta que dos días estuve bastante rato en el gimnasio. Realmente, sólo corrí dos días, fui dos ratos en bici (más la carrera del domingo en btt) y nadé otros dos ratos más. En total: 3.600m-152,79km-21,67km.

Como digo, poca cosa y a ritmos suaves. Esta semana que entra quiero darle un poco más de intensidad a la carrera a pie y trabajar mucho la técnica de natación. Por lo tanto, esta semana (y seguramente las próximas) la bici tendrá muy poca presencia.

El resumen semanal es el siguiente:

Lunes.- Salida con la btt de 2h13’14” para hacer 37,82 km con casi 1.000 m de desnivel acumulado. Como siempre, a ratos estuve algo perdido y hubo un buen rato de carretera. Después de la bici, 2.000 m de natación en 40’27”.

Martes.- 30’16” de rodaje a pie a un ritmo cómodo de 4’33”/km para hacer 6,65 km. Después, 80’ de gimnasio haciendo un buen circuito de pesas con Arancha.

Miércoles.- Salida con la bici de carretera de 1h51’54” para hacer 54,56 km. Terminé a una media 29,3 km/h y 116 ppm. Como anécdota, decir que con esas pulsaciones medias (a lo más que llegué fue a 139 ppm), el Garmin calificó mi entreno como menor, es decir, que no lo consideró ni de mantenimiento. Después, 1.600 m de natación donde coincidí con Guillem que, después de fijarse en lo mal que nado, me dio unos cuantos consejos que le dan sentido a muchos ejercicios de técnica y que seguro que me vendrán bien. Ahora toca tenerlos en cuenta y ponerlos en práctica.

Jueves.- 1h02’47” de carrera a pie a mediodía (a ratos bajo la lluvia) para 14,02 km terminando a un ritmo medio de 4’29”/km.

Viernes.- 20’ de elíptica + 95’ de gimnasio + 5’ de carrera en cinta. Otro buen (y largo) circuito de pesas con Arancha, que está intentando recuperarse de sus molestias en las rodillas.

Sábado.- Tenía pensado ir a nadar, pero al final descan.

Domingo.- Estaba inscrito en la 4ª Marxa Btt Tarragona (56 km) y la verdad, con toda la lluvia que había caído el sábado, por un momento pensé que se anularía. No fue así. El tiempo nos respetó durante la carrera y al final fue una mañana diferente y entretenida. Aún no hay resultados ni clasificación oficial pero según mi Garmin fueron 3h18’49” de pedaleo (3h32’37” en total) para un total de 56,24 km (queda pendiente la crónica). Después de la carrera, volví a casa en bici y sumé unos 5 kilómetros más.

Pues hasta aquí esta semana. En los próximos días, como he dicho, intentaré correr y nadar bastante más (cantidad y calidad) y el domingo correré los 10 km de "Tarragona 2017", donde el propósito será intentar bajar mi mejor tiempo de 39'20". Veremos si lo consigo.

domingo, 21 de octubre de 2012

Segundo aniversario del Blog

 
Y ya van dos. Hoy se cumple el segundo aniversario del blog. Parece mentira lo rápido que ha pasado el tiempo. Incluso demasiado para mi gusto en algunos aspectos. Pero bueno, lo importante es que sigo aquí, entrenando duro, con la misma ilusión del primer día, disfrutando todo lo que puedo de lo que más me gusta y, paso a paso, consiguiendo cada cosa que hasta ahora me he propuesto. Sin duda, eso es lo que cuenta. Y entradas como la de hoy sirven para intentar ser un poco más consciente de ello, para parar un momento, echar la vista atrás y sentirse orgulloso y satisfecho de uno mismo. Eso sí, esto no para y quiero más. Sigo considerándome un aprendiz, un principiante en muchos aspectos con un montón de cosas aún por aprender y con muchas ganas de mejorar en todo lo que pueda. Estoy convencido de ello, estoy convencido de que lo haré y espero poder seguir compartiéndolo en este blog con todo el mundo al que le interese.

Pero a lo que vamos. Como decía, hoy se cumplen dos años de mi primera entrada en el blog. Este segundo año ha sido increíble, en especial estos últimos meses. El número de visitas se ha duplicado respecto al año pasado (más de 20.000), he recibido algún comentario (no demasiados) de nuevos visitantes y soy consciente que a pesar de la escasez de comentarios, el blog tiene bastante aceptación y una serie de visitantes “fijos” que siguen y leen casi cada entrada que escribo. A todos vosotros, a los que ya estaban el año pasado y continuáis aquí y a los que lo leéis desde hace poco de forma habitual, muchas gracias! No voy a decir que este blog no tendría sentido sin vosotros, pero sí es cierto que me gusta sentir que la gente se interesa por lo que escribo. Y si de la misma forma que cuando yo empecé a escribir y tomé como referencia una serie de blogs que me sirvieron de “modelo a seguir” (deportivamente hablando, claro), este blog sirve como una pequeña ayuda a alguien a resolver sus dudas sobre carreras, material, alimentación, entrenamientos,... decir que me sentiré muy contento y habrá merecido (un poquito más) la pena haberlo creado en su día.

Pues nada más. Como decía antes, esto no para y toca seguir. Esperemos que el 21 de octubre del año que viene pueda volver a escribir una entrada celebrando el tercer aniversario y seguir igual de orgulloso que hasta ahora de este pequeño rincón y de los “logros” que haya podido sumar a mi vida deportiva como aficionado.

Muchas gracias a tod@s!

jueves, 18 de octubre de 2012

Propiedades de la algarroba


En mi afán por seguir una alimentación cada día mejor y más sana, intentando escoger alimentos lo más naturales posible y que, además, me aporten algún tipo de ayuda en el día a día con mis entrenamientos, tengo que decir que recientemente he empezado a consumir uno nuevo: las algarrobas. Hablaré de ellas porque todos (o casi todos) sabemos lo que son pero la gran mayoría desconocen de que forma las podemos consumir y las propiedades supuestamente tan beneficiosas que tienen.

Hace cosa de un mes y medio, en la web de la panadería Rincón del Segura (por cierto, muy recomendable) donde entré con la intención de comprar harina integral de espelta (últimamente hago mucho pan), vi que vendían unas galletas naturales hechas con harina de algarroba. Me llamó la atención, busqué información sobre las propiedades de la algarroba y las compré. La verdad, no me decepcionaron. Poco después, compré directamente en un herbolario la harina de algarroba y siguiendo los ingredientes marcados en la bolsa de las galletas que había comprado, las hice en la Thermomix poniendo a ojo las proporciones (después dejo la receta). Me quedaron bastante parecidas, no sé si mejor o peor, pero están muy buenas. Tienen un toque parecido al chocolate. Hasta el momento, además de para hacer galletas, también he usado la harina de algarroba para “chocolatear” o mejor dicho, “algarrobear” la bebida de soja y con el yogur natural. De las dos formas está muy bien. Sinceramente, me ha sorprendido gratamente el sabor y la textura que tiene, no me la imaginaba tan agradable, ni mucho menos.

Después de esta pequeña introducción acerca de mi experiencia con este alimento, os dejo información un poco más “científica” sobre las propiedades de la algarroba:

“El místico y aromático árbol del algarrobo es de la familia de las leguminosas y por ello da frutos en forma de vaina. De sus semillas pulverizadas se produce una harina muy dulce, con sabor bastante parecido al cacao y con muchas propiedades nutricionales y terapéuticas, y con la gran ventaja de que no contiene gluten, por lo que pueden usarla las personas celiacas. Los indígenas utilizaban la algarroba para producir bebidas y hoy en día se utiliza para prepara muchos platos, sobre todo postres, con un sabor muy parecido al chocolate pero con ventajas mucho mayores que el cacao. Esta harina es rica en azúcares naturales (ventaja contra el azúcar refinada que contiene el chocolate convencional), contiene mucho hierro, calcio, magnesio, fósforo, etcétera, y muchas vitaminas como la A, la B1 y la D. Tiene pocas grasas y, además, son grasas benéficas, por lo que no produce sobrepeso. Comparada con el chocolate, la algarroba es tres veces más rica en calcio.

De las legumbres o algarrobas tradicionalmente se ha aprovechado todo:


La harina de algarroba actualmente se emplea sobre todo para la alimentación  animal, bien directamente o como un componente de los piensos compuestos, aunque también se utiliza en alimentación humana después de una serie de tratamientos como deshidratación, tostado del producto y molienda fina, con los que se obtiene un producto de aspecto y sabor similar al polvo de cacao.

En la composición de la harina de algarroba destaca la presencia de entre un 40 y un 50% de azúcares, fundamentalmente fructuosa, glucosa y sacarosa. También tiene un 5% de proteínas y muchos minerales: hierro, calcio, magnesio, zinc, silicio, fósforo y mucho potasio, lo que unido a su bajo contenido de sodio contribuye a balancear nuestra dieta tan rica en sodio.

Un aspecto importante de la composición de la algarroba es su riqueza cualitativa en fibras (pectina y lignina fundamentalmente), que benefician la flora intestinal, disminuyendo las bacterias e incrementando los lactobacilos. Además, la pectina, conocida como espesante, tiene otras propiedades: laxante, coagulante, bactericida, preventiva del cáncer, reductora del colesterol, ayuda a la formación de las membranas  celulares, elimina metales pesados y sustancias tóxicas del organismo y protege la mucosa intestinal.

Recientes estudios demuestran la gran efectividad de la harina de algarroba contra úlceras, diarreas infantiles e infecciones intestinales. Sus fibras cumplen un triple efecto: convierten el líquido en gel coloidal, distienden las paredes intestinales y estimulan un correcto peristaltismo que elimina las contracciones dolorosas

Otro componente importante de la algarroba son los taninos, antes considerados producto tóxicos y hoy revalorizados dentro del grupo de los polifenoles como antioxidantes y potentes protectores que evitan la formación de las cancerígenas nitrosaminas, son antiinflamatorios, antirreumáticos y benéficos para el corazón y los riñones.

La algarroba en la cocina se emplea  como ingrediente de diferentes tipos de bizcochos, helados, flanes y salsas. Además, con la harina de algarroba se obtiene un exquisito  chocolate, exento de cafeína y teobromina, dos excitantes contenidos en el auténtico chocolate obtenido del cacao.”

Fuentes:

Para terminar, os dejo la receta (aún en fase experimental) de las galletas con harina de algarroba que hice la semana pasada. Seguro que modificando un poco las proporciones podrían quedar mejor. Seguiré probando. Hay que decir que las hice en la Thermomix pero quien no la tenga las puede hacer igual, sólo que con un poco más de paciencia a la hora de amasar.

Galletas de algarroba.

Ingredientes:
  • 250 gr harina integral de espelta
  • 150 gr harina de algarroba
  • 90 gr azúcar moreno
  • 100 ml leche de soja
  • 75 gr aceite de oliva virgen extra
  • 3 cucharadas de almendras
  • 1 cucharada gasificante
Poner el azúcar en el vaso de la Thermomix y pulverizar con golpes de turbo.

Echar el resto de los ingredientes en el vaso de la Thermomix y mezclar 10 segundos velocidad 5-10.

Sacar del vaso y darle a las galletas la forma que uno quiera. La masa no me quedó muy consistente, con lo cual hay que tener paciencia para poder formar lo que será la galleta. A mí me costó y me salieron galletas bastante gruesas.

Precalentar el horno a 180º ventilador sino calor arriba y abajo.

Ponerlas en una bandeja de horno con un papel sulfurizado o papel vegetal y hornear a 180º unos 10-15 minutos hasta que estén doradas.

Si alguien se anima, de verdad, no se arrepentirá.

martes, 16 de octubre de 2012

Crónica XXXV Carrera Popular de San Nicasio

Este domingo, aprovechando el fin de semana largo que pasamos en Madrid, me inscribí a la XXXVª Carrera Popular de San Nicasio que se celebraba en Leganés. La verdad es que llego a estas alturas del año con muchas ganas de hacer carreras (quizás un poco para compensar todas las que me perdí a finales del año pasado y comienzos de este por la lesión) y de disfrutar de lo que más me gusta sin ninguna pretensión más, aunque también es cierto que una vez estás allí, rodeado de ese ambiente y con tu dorsal puesto, uno siempre tiende a esforzarse más de lo que en un principio se tenía planeado. Y eso es lo que me pasó a mí el domingo. Durante toda la semana estuve mirando de reojo hacia esta carrera y, como quien no quiere la cosa, me empecé a plantear ir a por una buena marca. Otra parte de mí no estaba por la labor y me pedía calma, pasar un buen rato corriendo y poco más. Al final, para no variar, ganó lo primero y se puede decir que fui a por todas.

Después de un buen madrugón, llegamos a Leganés con tiempo y con una temperatura que nada tenía que ver con la que me había encontrado en mi rodaje del sábado apenas 24 horas antes. Bastante frío y algo de viento. Sin duda, no era la mañana más agradable para correr. Hice un calentamiento muy breve, algunos estiramientos de rigor (nunca mejor dicho) y a la salida. Éramos unos 700 corredores y me coloqué adelantado aunque en un lateral muy escorado. Tenía el arco de salida enfrente y sabía que me costaría arrancar porque tendría que rectificar el recorrido por lo estrecho que era. Y así fue. Salida complicada donde me sorprendió la cantidad de gente que me llegó a adelantar. Primeros metros incómodos tanto por el ritmo como por la gente y por el consiguiente esfuerzo extra que tuve que hacer para encontrar mi puesto en la carrera lo antes posible. Pasé el primer kilómetro en 3’46” sin ir demasiado forzado pero sin encontrarme lo cómodo que esperaba. Ahí empecé a pensar que esta carrera, si quería apretar para conseguir una buena marca, se me iba a hacer muy larga. Aguanté el ritmo en los dos siguientes kilómetros (3’48” en el segundo y 3’46” en el tercero) pero a partir del cuarto, ya con varios toboganes en las piernas, el ritmo decayó hasta pasar el cuarto kilómetro en 3’56” y el quinto en 3’57”. En el sexto kilómetro me repuse bastante y volví a correr al ritmo del principio. A esas alturas aún iba a un ritmo medio que, de haberlo mantenido, hubiera terminado la carrera en menos de 39 minutos pero no pudo ser. En los kilómetros siete y ocho aflojé un poco y el nueve acabó con todas las ilusiones que tenía. Llegó una subida de unos 600 metros en los que subimos casi 25 y que rompió por completo mi ritmo, pasando ese noveno kilómetro en 4’36”. Ya sólo faltaban los últimos metros, prácticamente llanos, para echar el resto e intentar bajar de esa barrera psicológica de los 40 minutos. Eso, al menos, sí que lo conseguí, haciendo el último kilómetro otra vez por debajo de los 4 minutos (3’58”) y los últimos metros (me salieron unos 50 de más) al sprint. Finalmente, tiempo de 39’48” llegando a meta en la posición 54 (22º de mi categoría) de 667 corredores que terminaron la prueba (resultados).

Sensación extraña con la que acabé. Debería estar muy contento por el resultado, otra vez sub 40’ en una carrera con un recorrido complicado por los continuos sube-baja que hubo, pero no fue del todo así. Al final me quedé con la sensación de haber desperdiciado una buena oportunidad para mejorar mi marca en los 10km (menos mal que estos meses quería correr sólo para disfrutar y no presionarme que sino...). Pero lo peor para mi es que, a lo largo de la carrera, tampoco terminé de sentirme a gusto corriendo y llegué a pasar hasta algo de frío. Y digo que es peor esto segundo porque sé que de aquí hasta final de año tendré varias ocasiones para conseguir mejorar mis marcas. Ya se verá.

Como de costumbre, dejo algunas fotos de la carrera y los resultados del Garmin.




lunes, 15 de octubre de 2012

Otra vez sub 40'

Semana con seis días de entrenamiento y poco menos de nueve horas en total, donde la carrera a pie ha cobrado mayor protagonismo que cualquier otra cosa. A lo largo de toda la semana tuve en mente la carrera del domingo en Leganés y, además, inconscientemente he estado pensando bastante en una Behobia-SS que cada vez está más cerca. Ya sé que en mi anterior entrada dije que durante estos últimos tres meses de año sólo quería disfrutar y que no quería meterme ningún tipo de presión para conseguir uno u otro resultado, pero también es verdad que eso no significa que vaya a ir a pasearme y no intente dar lo mejor de mí. Por consiguiente, hay que seguir entrenando. Además, en el momento de ponerse un dorsal, es muy fácil cambiar de opinión y olvidarse de todo lo que uno ha pensado, dicho o escrito hasta el momento. Pues eso. Que como consecuencia de esa mayor importancia de la carrera a pie durante esta semana, la gran “olvidada” ha sido la natación, a la que sólo le dediqué un rato. En bici, dos buenas salidas rodando tranquilo pero acabando a ritmos decentes. Para no enrollarme mucho más, este es el resumen de la semana:

Lunes.-
Salida en bici de 1h56’01” para hacer 57,05km. Media de 29,5 km/h y 1.200 metros de desnivel acumulado.

Martes.- Rodaje a pie de 55’14” para 12,34 km (con subida al Santuario del Loreto incluida) a un ritmo de 4’29”/km en el que me sentí muy cómodo. Después, 2.000 m de natación en 40’31”.

Miércoles.- Otra salida en bici de 2h11’41” para recorrer un total de 65,76 km a una media de 30,0 km/h y un desnivel acumulado de unos 1.100 metros. Después, 1h de gimnasio con Arancha intentando trabajar un poco de todo.

Jueves.- Rodaje a pie de 54’24” para 12,27 km a un ritmo de 4’26”/km. Como decía antes, cada vez estoy más cómodo moviéndome entre esos ritmos, así que creo que es el momento de apretar algo más en este tipo de rodajes y de realizar algún que otro entreno progresivo.

Viernes.- Descanso y viaje a Madrid.

Sábado.- Rodaje a pie pre-competición de 28’59” a ritmo de 4’26”/km (quizás demasiado rápido) seguido de 4 progresivos de 100 m. En total, 7,09 km.

Domingo.- XXXVª Carrera Popular de San Nicasio en Leganés (10 km) con sensaciones contrapuestas. Por un lado, contento con ese resultado de 39’48” (mi segunda mejor marca en la distancia) pero por otro lado tengo que decir que las sensaciones mientras corría no fueron las mejores y no disfruté demasiado. Cuando escriba la crónica (espero que mañana) intentaré explicar los motivos.

Esta semana habrá que darle mayor protagonismo a la bicicleta de montaña, ya que el domingo correré en la 4ª Marxa Btt de Tarragona. Serán 56km por montaña (espero que no excesivamente técnicos) y unos 1.340 metros de desnivel acumulado (no demasiada cosa parece). A ver si estos días puedo hacer un par de salidas por tramos del recorrido que nos espera:


Pues esto ha sido todo. Mañana espero poder escribir la crónica de la carrera de ayer en Leganés. Feliz semana!

lunes, 8 de octubre de 2012

No todo va a ser entrenar

Esta semana ha sido, sin duda, la más tranquila que recuerdo en mucho tiempo en cuanto a volumen de entrenamiento. No he llegado ni a las cinco horas y he descansado dos días (después de 18 días seguidos haciendo siempre alguna cosa). Todo un lujo. Sé que de vez en cuando es bueno descansar y me habrá venido bien, pero a esos dos días de descanso (sábado y domingo) hay que sumar que hemos estado fuera de casa y, quieras o no, siempre comes cosas diferentes y luego se nota en el peso. Se me ha hecho raro entrenar tan poco pero como digo en el título de la entrada, no todo en la vida va a ser entrenar. Estos meses, sin nada que me motive especialmente (ni siquiera en la Behobia-SS tengo más motivación que la de disfrutar) sólo quiero divertirme en cada entreno y cada competición (vienen unas cuantas seguidas). A partir del 1 de enero ya habrá tiempo de exigirme un poco más.

Como decía, el calendario viene cargado de competiciones y, si puedo, tengo pensado hacer una cada domingo durante siete semanas seguidas. De momento, el próximo fin de semana, aprovechando el viaje a Madrid, correré la XXXVª Carrera de San Nicasio (10km) en Leganés. A partir de ahí, las carreras que tengo pensado hacer son estas:

21/10/2012: 4ª Marxa BTT Tarragona: 53 km en btt.
28/10/2012: 10k Tarragona 2017: 10 km.
04/11/2012: Cursa Solidària Port Aventura: 10km.
11/11/2012: Behobia-San Sebastián: 20 km.
18/11/2012: Carrera de la Solidaridad (Madrid): 10km.
25/11/2012: Mitja Marató de Tarragona: 21,1km.

De momento esto sólo es una idea, veremos si puedo cumplir con ella otengo que dejar de hacer alguna por el motivo que sea.

En cuanto al entrenamiento semanal, ha sido este:

Lunes.- 45’ de elíptica + estiramientos para recuperarme de la Cursa El Replà. Noté la falta de costumbre de correr por montaña y estuve varios días con los cuadriceps muy tocados (el derecho especialmente). Después, 1.200 m (23’30”) de natación en una piscina del Serrallo saturada de gente. Con el comienzo de los cursillos creo que voy a ir poco por esa piscina, fue horrible. Por suerte tengo otras opciones.

Martes.- Salida muy tranquila en bici de 1h29’16” para 43,94 kilómetros (media de 29,5 km/h).

Miércoles.- 20’15” de rodaje para 4,40 km a un ritmo medio de 4’36/km seguidos de 1.500 m de natación suave en 31’55”.

Jueves.- 55’57” de rodaje para 12,56 km a un ritmo medio de 4’27”/km.

Viernes.- 30’40 de rodaje para 6,38 km a un ritmo de 4’48”/km.

Sábado y domingo.- A pesar de llevarme ropa para correr por Andorra, decidí descansar después de muchos días seguidos. Seguro que me ha ido bien y podré empezar esta semana con mucha energía y con ganas de hacer muchos y buenos kilómetros.

Dejo alguna fotos del fin de semana donde hicimos alguna que otra actividad en Naturlandia. Muy recomendable, especialmente, el Tobotronco.





miércoles, 3 de octubre de 2012

El entrenamiento cruzado

Hoy os dejo un artículo que leí hace ya algún tiempo en el blog de Jaime Menéndez de Luarca, triatleta del que ya copié un artículo sobre el volumen de entrenamientos hace unos meses. En este caso habla del entrenamiento cruzado, un concepto a tener en cuenta en muchos deportes pero especialmente en el triatlón. Me gustó porque me sentí identificado. Este año llevo la mitad de kilómetros de carrera a pie que el año pasado y, aunque después de la lesión me costó unas semanas volver coger los ritmos que tenía, enseguida los recuperé e incluso mejoré algunos registros. Ahí va el artículo:

"El entrenamiento cruzado en triatlón supone la mejora conseguida en una de las disciplinas gracias al entrenamiento de las otras dos. A pesar de que muchos entrenadores y triatletas no creen firmemente en estas adaptaciones, son mayoría quienes sí creemos en estos beneficios.

Al igual que en la psique, la terapia Gestalt alude a una integración (el todo es más que la suma de las partes). La visión holística del cuerpo humano es la mejor manera de explicar qué ocurre cuando queremos buscar la explicación a un momento de forma de un deportista, y en este momento de forma influyen los 1440 minutos que vivimos cada día, y por lo tanto lo que hagamos en la piscina influirá (queramos o no) sobre el ciclismo y la carrera, y así en todas las combinaciones posibles.

Los deportistas procedentes de una disciplina aislada se preocupan por la perdida de rendimiento en este deporte al disminuir el volumen especifico. Esta perdida es muy pequeña en deportistas de alto nivel y aunque no significativa, sí puede ser significante en sus competiciones. Sin embargo, en deportistas de grupos de edad he observado que en muchas ocasiones (obviamente, nada aplica generalmente a todos los individuos) estos mejoran marcas en pruebas atléticas al pasarse al triatlón, a pesar de que el volumen baja entre el 40 y 60%.

Intentar mantener el volumen de la disciplina de origen mientras iniciamos a un deportista en las otras dos es un error que llevara a sobrecargas, lesiones y grandes frustraciones. La carga entendida como el resultado de multiplicar la intensidad por el volumen aumenta de modo significativo en corredores al pasarse al triatlón, siendo la natación y el ciclismo deportes sin impacto que permiten mantener una carga más elevada.

Creo que es posible mantenerse al máximo nivel con relativo poco volumen, lo que evita lesiones y da continuidad a la concatenación de temporadas. Este volumen contenido debe serlo más aún en quienes no son profesionales y necesitan encajar los entrenamientos en su vida".

martes, 2 de octubre de 2012

Crónica Cursa de Muntanya El Replà

Este domingo tocaba cambiar de aires, desconectar de tanta natación, bicicleta y asfalto y salir a correr por la montaña. La carrera elegida fue la primera edición de la Cursa de Muntanya El Replà de 13,5 km con comienzo y fin en el Pla de Santa María. Tengo que decir que a pesar de no ser mi especialidad (si es que tengo alguna), disfruté mucho de la experiencia y puedo decir fue muy satisfactoria en todos los sentidos.

La lluvia caída a lo largo del sábado y las malas previsiones que había para el domingo hacían pensar en un extra de dureza y de diversión pero al final todo quedó en nada. Mejor para correr cómodo, rápido y a gusto pero me quedé con ganas de mojarme y embarrarme un poco mientras corría. Es una tontería pero viendo como fue el sábado ya me había hecho a la idea.

Arancha, mi hermano, César y yo llegamos con tiempo y recogimos el dorsal tranquilamente. Qué gusto dan este tipo de carreras nada masificadas a la hora de hacer colas y evitar aglomeraciones. En total éramos unos 150 corredores. Después, un calentamiento muy suave y a la salida. Antes de empezar aún tuve tiempo de hablar un momento con Joan Carles (en nada nos vamos a la Behobia-SS) y con Enric.

Sinceramente, llegaba a la carrera sin haberme informado demasiado sobre el recorrido. Sabía que eran unos trece kilómetros y que los dos primeros eran prácticamente llanos, pero poco más. No sabía exactamente el desnivel que me encontraría ni como estaba distribuido, así que la idea principal era disfrutar y, sobre todo, no hacerse daño en las bajadas. Está claro que una vez metido en la carrera lo intentas hacer bien y dar lo mejor, pero sin agobios ni presión por conseguir un determinado tiempo. En estos próximos tres meses sólo quiero disfrutar de lo que hago y, ante todo, no lesionarme.

Mi hermano, César y yo nos colocamos bastante adelantados en la salida. Debíamos estar en tercera o cuarta fila y no tuvimos problemas para arrancar. Salimos rápido y enseguida se formaron los primeros grupos. Primer kilómetro en 3’49” y segundo en 4’07”. Hasta antes de terminar ese segundo kilómetro fui más o menos a la par que mi hermano pero poco a poco se fue descolgando. No me esperaba ir por delante suyo. A partir de ahí comenzaba un ascenso casi continuo que duraría hasta el séptimo kilómetro. Las subidas, dentro de lo que cabe, no me van tan mal y a pesar de bajar el ritmo (como es lógico) fui subiendo cómodo y sin que nadie me adelantara. Incluso gané alguna posición. Especialmente duro fue el tramo que va entre el sexto y el séptimo kilómetro. En ese momento decidí caminar unos metros porque sentía que la velocidad a la que corría era prácticamente la misma que si caminaba alargando el paso. Para hacerse una idea de la dureza de ese kilómetro, decir que prácticamente todos los kilómetros los pasé entre los 4 y 5 minutos y este me salió en 8’32”. Una vez arriba (en el Replà) empezaba un tramo con varias subidas y bajadas que no impedían correr a un ritmo alto y que duraban hasta el kilómetro 11, donde llegaba el momento de encarar un tramo de unos 200 metros de bajada más técnica y dos últimos kilómetros muy rápidos por pista y asfalto. Me defendí bien, incluso adelanté a un corredor en el tramo “difícil” y de ahí hasta el final mantuve la posición. Lo mejor de todo, la sensación de sentirme ligero bajando, de correr sin forzar más de la cuenta y de terminar sin ninguna molestia. Llegué con un tiempo de 1h04'45" en la posición 16 de 143 corredores (resultados). Muy contento con el resultado y todavía más con las sensaciones que tengo últimamente. 

Antes de poner las fotos y los datos del Garmin, me gustaría felicitar a la organización de la carrera. Acostumbrado últimamente a que pocas (muy pocas) carrera de este tipo cueste menos de 15 euros y en muchas ocasiones recibas una bolsa del corredor bastante pobre (si la recibes), en esta fue todo lo contrario. Algo más barata que la mayoría, buenos voluntarios y avituallamientos, recorrido bien señalizado, bolsa del corredor completa con descuentos interesantes, bebida y comida a la llegada (bollería, fruta y bocadillos)... En fin, una gran forma de pasar la mañana del domingo haciendo lo que nos gusta.

Ahora sí, las fotos de Arancha y alguna de la organización (han colgado en la web varias galerías de fotos gratis), el diploma de la carrera y los datos del Garmin:




 
 

 


lunes, 1 de octubre de 2012

Disfrutando del momento

Qué bien se está entrenando lo que a uno le apetece y cuando lo apetece. Segunda semana post-Berga encontrándome con sensaciones geniales, sintiéndome recuperado del todo, sin molestias y con la moral por las nubes. Ya lo dije hace un par de meses y creo que a estas alturas puedo ratificarlo, estoy mejor que nunca. No sé lo que durará ni si durará este estado, pero lo cierto es que lo estoy disfrutando mucho. Esta semana he vuelto a ir por libre y me he centrado casi del todo en la natación. Tanto, que he batido mi récord de metros nadados en una semana para dejarlo en 14.200 metros, o lo que es lo mismo, 568 largos de piscina en sólo cuatro sesiones. Contento y esperando que a la larga esto tenga su recompensa. Aparte de las cuatro sesiones de natación, también he salido tres días a correr a buenos ritmos (dos entrenos y una competición) e hice algo de bicicleta estática en el gimnasio un día. No ha estado mal la semana pero he echado de menos alguna salida en bici. Esta semana alguna caerá. En resumen, algo menos de 9 horas repartidas así:

Lunes.- 30’ de bicicleta estática (12km) + 30’ de gimnasio.

Martes.- Rodaje de 40’28” por Tarragona para hacer 9,13 km a 4’28”/km + 3.000 m de natación variada en 59’58” + 10’ de aquarunning en la piscina con Arancha.

Miércoles.- 5.200 de natación en 1h52’52”.

Jueves.- Rodaje de 55’09” por Torredembarra y Altafulla a mediodía para hacer 12,33 km a 4’28”/km.

Viernes.- 3.000 m de natación variada en 1h00’33”.

Sábado.- 3.000 m más de natación variada (con 1.600 m de técnica) en 1h05’43”.

Domingo.- Corrí la 1a Cursa de Muntanya El Replà (13,5 km) haciendo un tiempo de 1h04’43” y quedando el 16 de 143 corredores. Como siempre, la crónica y las fotos las dejo para mañana.

Al margen del entrenamiento, esta semana también he estado de revisiones varias. La primera, la revisión médica del trabajo. Aún no tengo los resultados de los análisis pero esperemos que los niveles de colesterol algo altos se hayan reducido desde junio. No me preocupa pero tengo ganas de saber los resultados. El dato más significativo de la revisión fue que en el electro me salieron sólo 41 pulsaciones en reposo. Cada vez estoy más bajo. Antes de final de año quiero hacerme una prueba de esfuerzo para saber si ha habido algún cambio importante desde la última que me hice hace más de un año y medio. Y la segunda revisión fue en el podólogo. Ese es quizás el único lunar de la semana. Me volvió a recalcar lo de la flexibilidad ya que no notó ninguna evolución desde febrero y me revisó las plantillas, mejorando la amortiguación. Las probé ayer en la cursa El Replà y me resultaron muy cómodas.

Para terminar, dejo la crónica que publicó “El Vallenc” el día 28 de septiembre de 2012 sobre el Triatló Popular de Tarragona. Últimamente estoy “chupando” mucha cámara.
Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...